sábado, 18 de diciembre de 2010

Taxi Out

Primera parte en el libro de Sensueye... próximamente a la venta!!

Sigo tan excitada que parece que tu dedo continúa dentro de mí…
Entramos en el ascensor el cual es sólo testigo de nuestras lenguas que se atraen y luchan por alcanzar el fondo de nuestras bocas, recordando aquellos besos inocentes y adolescentes que hace quince años nos dimos; besos que se han vuelto valientes, fuertes y maduros. Tus manos se pierden entre mi cabello, sujetando mi cara, mirándome con un deseo inexplicable, como si uno de tus deseos se estuviera haciendo realidad.
Me llevas de la mano hasta la puerta de tu casa que en cuanto se cierra hace que nuestros cuerpos se unan como dos piezas perfectamente diseñadas que ruedan por la pared y las manos se mueven con mucha rapidez intentando tocar lo antes posible cada rincón de nuestros cuerpos.
Me susurras al oído que nunca has tenido tantas ganas de sentir a alguien, que nadie te excita tanto, y mi fogosidad crece tanto que te digo muy segura que nadie te va a follar como yo.
Los abrigos caen simultáneamente al suelo, tus manos frías se sitúan en mi cintura subiendo lentamente mi camiseta y tus ojos se clavan en mis pechos que sobresalen del sujetador. Me quitas el sujetador suavemente, noto como el tirante se desliza por mi hombro con la yema de tu dedo. Me dices que quieres verme despacio, observarme y no perder ni un momento de tu vista el cuerpo que siempre has deseado ver desnudo. Yo te beso, acariciando tus labios con la punta de mi lengua, recorriendo tu boca cerrada que se abre para suspirar. Cuando ves mis grandes pechos sobre mi fino cuerpo, mis pezones grandes, con una areola perfecta, duros, maduros…te vuelves loco y me apoyas contra la pared, subiéndome hasta tu cintura que rodeo con mis largas piernas, hundes tu cara entre mis pechos, y tu lengua los recorre, absorbiendo mis pezones, mordiendo mis tetas y apretando tus manos en ellas. Te quito la camiseta rápidamente y aprieto contra mí tu torso que es tan delgado que abarco con mis brazos y siento que se funde con el mío.
Foto de Passione Uomo
Se crea una pelea entre nosotros, jugamos a no darnos lo que queremos. Intentas besarme y yo aparto mi boca. Nos agarramos fuerte, haciéndonos daño, se inicia un deseo descontrolado, una lucha con movimientos duros, firmes. Nos despojamos de la ropa por el pasillo, arrancándola y desechándola con indiferencia. Tú me empujas hacia el sofá, te quedas de pie, mirándome…observando mis piernas abiertas, enseñándote mi rincón para que te puedas esconder…mis pechos firmes, esperándote en una postura más que provocativa. Tu boca se dirige directamente a mi vagina, tu lengua recorre mis labios sin vello, se centran en mi clítoris y cuando no me lo espero me introduces fuertemente dos dedos. Grito de dolor y los mueves lentamente dentro de mí, levantando tu cara para mirarme con esos ojos perturbados. Yo me aturdo, y tiro de tu pelo hacia atrás, me incorporo y araño tu espalda con una gata en celo, deslizando mis brazos hasta alcanzar tu culo que aprieto y azoto.
Continúa leyendo en el libro de Sensueye... próximamente a la venta!!

2 comentarios:

  1. Bufffffff con el frio que hace y el calor que tengo!!!!!

    ResponderEliminar
  2. Sería Diciembre... pero al leerlo más que invierno, parece infierno...

    Uno Cualquiera

    ResponderEliminar